lunes, 7 de junio de 2010

Poema: "El me trajo flores..."

El me mandó flores hoy...

No es mi cumpleaños o ningún otro día especial; tuvimos nuestro primer disgusto anoche y él dijo muchas cosas crueles que en verdad me ofendieron.
Pero sé que está arrepentido y no las dijo en serio, porque él me mandó flores hoy.

No es nuestro aniversario o ningún otro día especial; anoche me lanzó contra la pared
y comenzó a ahorcarme.
Parecía una pesadilla, pero de las pesadillas despiertas y sabes que no es real; me levanté esta mañana dolorida y con golpes en todos lados, pero yo sé que está arrepentido, porque él me mandó flores hoy.

Y no es día de San Valentín o ningún otro día especial; anoche me golpeó y amenazó con matarme, ni el maquillaje o las mangas largas podían esconder las cortadas y golpes que me ocasionó esta vez. No pude ir al trabajo hoy, porque no quería que se dieran cuenta. Pero yo sé que está arrepentido, por que él me mandó flores hoy.

Y no era el día de las madres o ningún otro día; anoche el me volvió a golpear, pero esta vez fue mucho peor. Si logro dejarlo, ¿Qué voy a hacer? ¿Cómo podría yo sola sacar adelante a los niños? ¿Qué pasará si nos falta el dinero? ¡Le tengo tanto miedo! Pero dependo tanto de él que temo dejarlo. Pero yo sé que está arrepentido, por que él me mandó flores hoy.

Hoy es un día muy especial: Es el día de mi funeral. Anoche por fin logró matarme. Me golpeó hasta morir. Si por lo menos hubiera tenido el valor y la fortaleza de dejarlo. Si hubiera aceptado la ayuda profesional... ¡Hoy no hubiera recibido flores!

Tomado de http://blog.enfemenino.com/blog/seeone_171566_4876022/-Mi-pequena-Princesa/Hoy-Me-Trajo-Flores

Luis Alberto Lopez Morell

viernes, 30 de abril de 2010

Editorial Diario Tal Cual 27 Abril 2010


Alcanzado el gran éxito unitario de la Mesa Democrática que ya se
explica y comenta por sí solo, forzoso es volver sobre un tema que
no debe dejarse morir en el siempre efímero dramatismo de la noticia
diaria: la violencia de género, que de pronto fue vívidamente
iluminado por la tragedia de Edwin Valero y su esposa Jennifer Vieira,
pero también, paradójicamente oscurecido por la notoriedad deportiva
del infortunado boxeador. El tema principal pasó a ser la trayectoria
de éste y quedó en un segundo plano el de la violencia
intrafamiliar.En todos los países democráticos la cuestión de la
violencia contra la mujer ha sido objeto de legislaciones específicas,
que castigan, de verdad, con penas severísimas a quienes golpean y
maltratan a sus esposas. En España, por ejemplo, donde el machismo y
el maltrato a la mujer tienen fuertes raíces sociales, se ha venido
haciendo un notable esfuerzo por desterrar esa práctica, castigándola
penalmente de manera muy pesada. Los médicos, por ejemplo, ante
cualquier hematoma sospechoso que observen en pacientes femeninos,
están obligados, so pena de ir a parar a los tribunales, a hacer la
denuncia ante las autoridades. Las medidas judiciales de protección a
mujeres maltratadas son aplicadas muy rigurosamente y la violación de
disposiciones cautelares, que prohíban, por ejemplo, al maltratador
acercarse a su víctima, implican acciones policiales inmediatas.En
nuestro país nos falta un largo camino por andar para cubrir el trecho
que hay del dicho al hecho. Tenemos las leyes pero no se aplican.La
inmensa mayoría de mujeres maltratadas se abstienen de hacer las
denuncias porque la experiencia les ha enseñado que están
completamente desprotegidas, a la merced de sus victimarios. La
infortunada esposa de Valero se desdijo de su acusación inicial porque
estaba consciente de que nadie iba a garantizarle su seguridad una vez
que volviera al hogar.Pero no se trata de un caso excepcional, que
algunos podrían explicar por la vía de la relativa impunidad que las
preferencias políticas de su marido le otorgaban a sus conductas. Nada
de eso. Son miles y miles las mujeres golpeadas por maridos o
compañeros absolutamente anónimos, y que, sin embargo, temen denunciar
exactamente por las mismas razones por las que no lo hizo Jennifer
Vieira: por miedo a las consecuencias y por la certidumbre que tienen
de la total desprotección en que se encuentran.Cifras recientes
muestran que estamos ante un problema muy prominente y muy grave. La
tragedia que terminó con el asesinato de Jennifer Vieira y el suicidio
de Edwin Valero debería dejar como saldo necesario una toma de
conciencia nacional sobre este problema de salud pública.Sería muy
equivocado creer que este es un asunto exclusivo de organizaciones
femeninas y feministas, aunque, por razones obvias, sean estas las más
activas en el reclamo, sino que compete a todos y en particular al
Estado, que, al respecto, debería imitar lo que en otros países ha
sido consagrado, tanto en la ley como en la práctica cotidiana y en la
educación, para borrar de la vida social esta vergüenza.

Enviado por la Abog. Griselda Barroso de la Defensoria de la Mujer, Baruta

Luis Alberto Lopez
VIF El Cafetal

lunes, 7 de diciembre de 2009

NO + VIOLENCIA.. ¡Es Responsabilidad de Todos!

La "Violencia Intrafamiliar o Doméstica", es un fenómeno que debido a su acelerado crecimiento, se ha convertido en una endemia mundial que no respeta ámbito geográfico o clase social.


¿Que se debe saber y hacer frente al maltrato?

  • Los malos tratos se producen en todos los niveles socioeconómicos y culturales.
  • Las personas violentas lo son mas por motivos culturales y no naturales.
  • Las personas que vivieron en un entorno violento y han sufrido agresiones tienen más probabilidades de convertirse en agresores a su vez.
  • El consumo de alcohol y drogas no son la causa directa de los maltratos, sin embargo al desinhibir al agresor, desencadena la violencia.
  • Si Ud. sufre de violencia debe hablarlo de inmediato con sus familiares o amigos.
  • En caso de riesgo de agresión puede solicitar una orden de protección ante un juez.
  • Puede denunciar tanto las agresiones físicas como psíquicas.
  • Guarde todas las denuncias así como los informes médicos de agresión sufrida.
  • Registre en un cuaderno todo lo ocurrido durante la agresión.
  • Guarde todas las pruebas que pueda, ropa dañada o manchada, objetos rotos.
  • Enséñele a sus hijos a ponerse a salvo y buscar ayuda.
  • Acuerde con algún vecino una señal de alarma
  • TODO CASO DE VIOLENCIA DEBE SER DENUNCIADO.


Existen leyes contra la violencia intrafamiliar, Venezuela Tiene a La Ley Orgánica sobre El Derecho de Las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, pero no es suficiente es necesario campañas audaces, constantes, educativas, que concienticen tanto a la comunidad en general como a los organismos del estado encargados de recibir y procesar las denuncias, no es posible que todavía existan funcionarios públicos que vean la violencia intrafamiliar como algo sin importancia, no dándole la seriedad necesaria.


La mayoría de golpeadores solo se aterrorizan cuando son puestos en evidencia, cuando son denunciados, cuando las mujeres aprenden a solicitar ayuda y a no callar.


La sociedad no puede ser parte de los oídos sordos, terminar con esa violencia es responsabilidad de todos.


Publicado por: Isabel Pestana

martes, 8 de septiembre de 2009

La violencia intrafamiliar es un virus social

E-mailImprimirPDF

violenciafamiliar2Una cena prevista para cuando las agujas del reloj marcarán las ocho en punto aceleraba su nerviosismo de no haber terminado a tiempo, y el escucharlo llegar la hizo descuidar un pollo pensado en salsa pero que terminó quemado, y fue la simple causa para que esa noche ella volviera a ser golpeada.

La "Violencia Intrafamiliar o Doméstica", es un fenómeno que debido a su acelerado crecimiento, se ha convertido en una endemia mundial que no respeta ámbito geográfico o clase social, así lo asegura la Dra. Elena Ibarra en uno de sus artículos sobre este tema publicados en el portal de Aporrea.

Según la Ley Orgánica sobre El Derecho de Las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la violencia doméstica es: "Toda conducta activa u omisiva, constante o no, de empleo de fuerza física o violencia psicológica, intimidación, persecución o amenaza contra la mujer por parte del conyugue, el concubino, ex conyugue, ex concubino, persona con quien mantiene o mantuvo relación de afectividad, ascendentes, descendientes, parientes colaterales, consanguíneos o afines".

De acuerdo a una investigación realizada por el Centro de Estudios de la Universidad Central de Venezuela, en el país la violencia contra la mujer reviste magnitudes y consecuencias sociales serias. El 95% de los casos atendidos por jueces de Paz son hechos de violencia intrafamiliar.

Una muestra de esta situación en Venezuela son las más de 500 denuncias que en promedio anualmente son recibidas por los cuerpos de policiales del estado Bolívar, tal y como lo informó el Diario de Guayana en el mes de marzo en el año 2008.

Sin embargo en el país aún no se puede hablar de estadísticas oficiales con respecto a este problema, el cual ya sido establecido como de salud pública, y esto sucede porque aún en pleno siglo XXI, muchas mujeres temen denunciar que ella y sus hijos son victimas de la violencia de sus esposos, o de algún otro miembro de la familia, que también podría ser el caso.

En un artículo publicado en el diario El Universal se explica que: "Las Naciones Unidas Venezuela estima que por cada agresión que una mujer denuncia hay nueve féminas que guardan -y aguantan- en silencio. Lo que quiere decir que en el país, para 2005, se registraron en promedio unos 300.000 casos de violencia doméstica, aunque los reportes de denuncia den cuenta de 36.777 agresiones."

Pero es la realidad del temor la primera que debe ser superada para lograr una lucha fuerte y encaminada a la erradicación de la violencia intrafamiliar, esto sumado a las herramientas legislativas que son un deber por parte del Estado.

En el caso de Venezuela, se cuenta con La Ley Orgánica sobre El Derecho de Las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, además de una serie de programas promovidos desde las diferentes instituciones, como es el caso de la Defensoría del Pueblo e INAMUJER, entre otras; cabe destacar que éste último presta atención y recibe denuncias a través de su línea telefónica 0800-mujeres (0800-685.3737), la cual es completamente gratuita y está al servicio de todas las venezolanas y venezolanos.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Perdidos


Aquél que lastima y aquél a quién lastiman necesitan ayuda. El que pega tiene evidentemente un aura de inseguridad difícil de manejar, probablemente fue maltratado igual o peor y aquél a quién le pegan tiene miedo de seguir al lado del maltratador. Los dos tienen miedo, deben ser tratados especialmente. Tienen problemas psicológicos, vacíos emocionales, recuerdos enfermizos, etc. Necesitan ser tratados. No es culpa de ninguno estar en cualquiera de esas posiciones, de ser maltratado a ser maltratador hay un solo paso… recordar. Recordar los momentos que se han vivido, la violencia sufrida, la que pega tanto física como psicológicamente. Estar frente a situaciones tensas, de rabias o de impaciencia lleva a manejar el problema según lo que se conoce, las herramientas que se han visto y se han aprendido a lo largo de la vida. En un ambiente en donde siempre ha habido violencia, violencia dominará. No hay peor peligro que aquél que tiene miedo y es capaz de sacrificar su bienestar y el de los suyos por temor a ser duramente reprendido. No hay peor peligro que aquél que maltrata por miedos no tratados, expuesto a una realidad siempre cambiante y vulnerable a personalidades pasivas para maltratar y activas que generen mayor miedo en el victimario. Difícil de manejar, ellos están perdidos…


Paz.

jueves, 3 de septiembre de 2009

CRÓNICAS DEL ACOSO / Para conocer la violencia contra la mujer...

En Venezuela, cada quince minutos, miles de mujeres son víctimas de maltratos por su pareja, y sólo una de cada nueve mujeres denuncia los actos de violencia ante las autoridades competentes, según el informe presentado por Amnistía Internacional en julio de 2008.
Unos meses después, el 22 de octubre de 2008, Luisa Ortega Díaz, la Fiscal General de Venezuela, declaró que sólo en Caracas se reciben 115 denuncias diarias de mujeres golpeadas.
Estas cifras son estimaciones, por cierto escalofriantes si detrás de las 115 denuncias recibidas cada día en la Fiscalía de Caracas puede haber mil mujeres más en la ciudad que no lo hacen… Son cifras aisladas, denuncias hechas en Caracas en sólo algunas de las instancias a las cuales las mujeres acuden para denunciar las agresiones. ¿Y cuántas mujeres serán en todo el país?
Desde hace tiempo, un número apreciable de organizaciones trabajan a favor de los derechos de la mujer y prestan asesoría y atención a las mujeres afectadas por la violencia intrafamiliar y por otros tipos de violencia. Sin embargo, no hay un mecanismo que permita agrupar la información recolectada por estos entes, y obtener así una estimación más cercana a la realidad sobre la verdadera magnitud y las características de tales agresiones.
Este vacío de información pareciera estar a punto de superarse, por lo menos así lo promete el trabajo que desde el año 2006 está realizando el Subcomité de Estadísticas de Género creado en el Instituto Nacional de Estadística (INE), el cual tiene la tarea de “garantizar la producción de estadísticas confiables y oportunas con enfoque de género, como herramienta para el diseño y el monitoreo de políticas y programas que garanticen la equidad y la igualdad de género como un derecho social fundamental, propiciando la articulación entre productores y usuarios de estadísticas oficiales”.
Con la figura de Mesas de Trabajo, en las cuales participan representantes de instituciones públicas y organizaciones no gubernamentales, dicho subcomité está poniendo bajo lupa conceptos, instrumentos y datos que el propio INE y otras instancias del gobierno nacional generan. Hasta la fecha se han instalado tres Mesas de Trabajo: Economía y Pobreza, Educación, y Contra la Violencia.
En esta última participaron inicialmente, además del INE, representantes del Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo, el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas y el Instituto Nacional de la Mujer. En el 2008 se incorporaron el Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores y Justicia y Amnistía Internacional, y la propuesta para este año 2009 es la ampliación de la Mesa con organizaciones no gubernamentales y fundaciones que tengan trayectoria en la materia.
Entre 2006 y 2008, la Mesa de Trabajo obtuvo resultados como éstos: diseño de un formato único para el registro de las denuncias de casos de violencia contra la mujer; aplicación de una Prueba Piloto del formato único en varias unidades de atención a víctimas en Caracas (Ministerio Público, Cuerpo de Investigaciones, Jefaturas Civiles); diseño y prueba de un Sistema de Información para el vaciado y procesamiento de los datos por parte de la Unidad de Tecnología del INE; aprobación de la providencia estadística, o establecimiento de norma que convierte el formato “Registro de denuncia de casos de violencia contra la mujer” en instrumento legal, de uso obligatorio por cada uno de los órganos receptores de denuncia (ORD) a nivel nacional; y presentación del registro, la norma y una propuesta de implantación ante las altas autoridades de cada uno de estos ORD.
En este año 2009 se instrumentará el Registro de denuncia de casos de violencia contra la mujer a nivel nacional. Primero se realizará una Prueba Piloto en cuatro entidades del país, con la finalidad de determinar el flujo de la información desde la captura del dato hasta la centralización de la información para su procesamiento y divulgación, seleccionando los estados Portuguesa, Aragua, Carabobo y Lara por presentar características distintas con respecto a la cantidad, la concentración y los tipos de ORD. Una vez culminado y verificado el funcionamiento, el instrumento será aplicado en todo el país.
Según el Subcomité de Estadísticas de Género, para culminar el proyecto exitosamente se requiere voluntad política, compromiso y recursos para la implementación, el funcionamiento y el mantenimiento del Sistema de Información, así como para el plan de sensibilización y capacitación de todas las instituciones y personas involucradas.
Deseamos éxito al Subcomité de Estadísticas de Género y los equipos interinstitucionales que lo sostienen. Necesitamos estadísticas, porque son una herramienta imprescindible en el esfuerzo para prevenir, controlar, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer y de género en la sociedad; para evaluar y mejorar las políticas y acciones; y para exigir que se haga más de lo que se está haciendo.
Escrito por Gabriele Merz